Prepararse para obtener el permiso de conducir tiene una gran importancia, porque la formación que se obtenga será la base para desarrollar con seguridad, durante toda la vida, una conducción responsable. Por eso elegir la autoescuela es una tarea en la que debemos poner el máximo interés.
La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) recuerda que las publicidades de las autoescuelas son contractuales y el alumno puede exigir las condiciones ofertadas y, si considera que éstas no se ajustan a lo anunciado, ponerlo directamente en conocimiento de los servicios de consumo de su Comunidad Autónoma, o bien dar parte a cualquier asociación de consumidores. Por ello es clave, antes de nada, personarse en la autoescuela para comprobar si la oferta anunciada se ajusta a la realidad.
La CNAE persigue que los centros de formación de conductores impartan una enseñanza que fomente un comportamiento al volante más cívico y seguro. Además aconseja a las personas que quieran obtener el permiso que elijan con todo cuidado su autoescuela, para lo cual ofrece ocho recomendaciones:
- Una vez localizado el centro, es conveniente preguntar a familiares, amigos o antiguos alumnos que hayan pasado por la autoescuela cómo fue el trato recibido y qué resultado obtuvieron.
Solicitar información en la autoescuela. Esta debe ser clara y concreta e incluir con todo detalle los horarios de las clases teóricas y prácticas, así como sus precios. - Leer con detenimiento el contrato por si contuviera alguna cláusula abusiva. Si la autoescuela ha publicitado alguna oferta, cerciorarse de que está reflejada fielmente en el contrato. La CNAE recomienda guardar la publicidad con la oferta, junto con la copia del contrato.
- Asegurarse de que los importes y conceptos que se cobran son los especificados en el contrato.
- Exigir el justificante de todos los pagos que se realicen.
- La enseñanza de la conducción tiene dos patas. Las clases teóricas son tan necesarias e importantes como las clases prácticas. El alumno hará bien en exigir una formación de calidad desde el principio. Debe pedir que le expliquen de un modo razonado la materia, de modo que pueda comprenderla y asimilarla perfectamente.
- Las clases prácticas deben servir para aplicar lo aprendido en las clases teóricas. Es obligación del profesor orientar el aprendizaje, corregir los errores del alumno e informar con toda veracidad a éste sobre sus progresos.
- Todas las autoescuelas de conductores están obligadas a tener hojas de reclamaciones. Si es preciso, el alumno debe exigirlas.